El uso de la telemedicina experimenta un notable aumento en España

 

La telemedicina se define como la prestación de servicios de salud a distancia empleando tecnologías de la información y las comunicaciones (TICs). Dentro de este campo médico emergente existen varias aplicaciones, como la teleconsulta, telediagnóstico, telemonitorización y teleasistencia. La telemedicina forma parte de un concepto más amplio denominado eSalud que comprende todas las actuaciones médicas llevadas a cabo a través de las TICs.

La atención telemática en el ámbito de la salud está aumentando considerablemente en los últimos años en nuestro país. Cada vez son más los pacientes que emplean la telemedicina como medio para comunicarse con su médico o profesional sanitario en tiempo real. Entre las ventajas que aporta la atención telemática se encuentran la reducción de costes en la asistencia sanitaria, en desplazamientos y en tiempos de espera.

No obstante, los pacientes no son los únicos demandantes de este campo biomédico, sino que los profesionales de la salud también se ven beneficiados de las numerosas aplicaciones de la telemedicina, como la telemonitorización de pacientes. De hecho, según el informe Mapa de Tendencias 2017, el año pasado aumentaron un 10% los proyectos que utilizan la telemonitorización de enfermos complejos.

Entre los sectores donde mayor impacto están teniendo las consultas digitales se encuentran las residencias de mayores, con servicios de teleenfermería y televideomedicina en dermatología, ortogeriatría y rehabilitación, y centros escolares, donde la telemedicina ya consigue resolver una media del 80% de las consultas.

La telemedicina permite mejorar la calidad asistencial en multitud de campos biomédicos. En este sentido, la eSalud también ha llegado a la Genética Clínica gracias a plataformas virtuales como E-GENETICARE, que presta un servicio de asesoramiento genético online dirigido tanto a pacientes como a profesionales de la salud a través de TICs.

 

Fuente: La Vanguardia